Esta tarta siempre me ha gustado mucho, por su colorido y por su dulzura. Me encanta el destalle del lazo alrededor del cuello de la jirafa con su moñita ladeada;. el número uno, que le da altura a la tarta haciendola mas vistosa, os puedo asegurar que le hace mucho, sin él la tarta se veria vacía. Para mi, es muy importante buscar algún elemento que la haga más alta, puesto que quedan mucho mas vistosa. Le añadimos la enredadera al uno para que quedase mas integrado en la tarta.
En esta foto podeís ver muy bien la carita de la jirafa. En el momento de hacer un muñeco existen muchos detalles que pasan desapercibidos, Son esos detalles los que hacen que el muñeco cobre vida, que tenga expresión y que no se vean artificiales como un pegote de masa simplemente con forma. Por supuesto depende del tipo de muñeco que queramos hacer hay que utilizar unos detalles u otros. A la jirafa le prefilamos los ojos y le pusimos pestañitas con colorante marron, en esta ocasión lo hicimos con un pincel muy fino, pero existen unos lapices de colorante que facilitan mucho este trabajo. Con el puntito blanco de los ojos hay que tener cuidado y poner los dos mas o menos en la misma direccion, si no pareceria una jirafa vizca, y quizas en una tarta con otra tematica venga bien, pero en esta no pegaba mucho que pusiesemos una jirafa con extravismo. Difuminar el ocico y las mejillas, con colorante en pasta mezclado en alcohol, le dio un aire muy tierno; he leido por algún sitio que para difuminar se utiliza el colorante en polvo, pero la verdad que no lo he probado, y como los colorante que tenemos son en pasta de momento seguiremos haciéndolo así.
A veces, en las tartas, solo nos preocupamos de lo primero que vemos, de la parte de delante, y nos olvidamos de la parte de atrás, y también es muy importante que vaya decorada, solo con ponerles algunos detalles bastará, y habrá ganado mucho, porque será una tarta terminada y bonita, la mires por donde la mires.
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